“Interpondremos las acciones legales pertinentes”: ANFP perdió la paciencia y arremetió en contra del Sifup
Tras las críticas del presidente del SIfup, Gamadiel García, la guerra entre la ANFP y el Sindicato se intensificó hasta el punto en que el ente rector no dialogará más con sus representantes.
La disputa entre la ANFP y el Sifup se intensificó con un cruce de acusaciones que han generado tensión en el fútbol chileno. Tras las contundentes declaraciones del presidente del Sifup, Gamadiel García, quien ratificó el paro de cara a la Supercopa y lanzó fuertes críticas contra la ANFP, el organismo rector del fútbol chileno arremetió con una decisión final en contra del Sindicato.
En un comunicado oficial, la ANFP señaló que tanto Gamadiel García como Luis Marín, presidente y tesorero del Sifup, respectivamente, “dejaron de ser interlocutores válidos para esta Asociación”.
Esto, “debido a sus constantes amenazas y descalificaciones personales expresadas en contra de este directorio, Consejo de Presidentes y sus clubes asociados”, agregó el escrito.
En esa línea, con García y Marín fuera del espectro de diálogo para la ANFP, es que el ente rector solicitó “a la Dirección del Trabajo iniciar un proceso de mediación, ante la imposibilidad de dialogar con los actuales representantes de dicho sindicato”.
En ese sentido, la situación, lejos de calmarse, pareció haber escalado aún más ya que, además, la entidad de Quilín también confirmó que interpondrá "las acciones legales pertinentes”.
Por otra parte, y lejos de terminar, la entidad liderada por Pablo Milad también solicitó a García y Marín “transparentar sus reales intenciones, ya que los jugadores actualmente se encuentran entrenando en sus clubes con absoluta normalidad [...] pese a haber anunciado una paralización hace más de 10 días”.
El ambiente se ha enardecido y, con cada nueva declaración, parece que las diferencias entre ambas organizaciones no se resolverán rápidamente. Este enfrentamiento no solo afecta las relaciones dentro del fútbol profesional, sino que también pone en duda el futuro de algunos eventos clave, como la Supercopa, el partido que da el pie a la temporada 2025, que podría estar en peligro.
Con la ANFP y el Sifup completamente distanciados, el fútbol chileno se enfrenta a un panorama incierto, donde las negociaciones y acuerdos quedan relegados por las confrontaciones, mientras que el bienestar de los jugadores y el deporte en general parecen quedar en segundo plano.