El inicio de la debacle del Scratch: A una década de la humillación de Alemania a Brasil
El 08 de julio de 2014, por la semifinal de la Copa del Mundo, la Canarinha fue aplastada sin misericordia por la selección germana, que le clavó un histórico 7-1 a domicilio a una Verdeamarela que vive la mayor crisis de su historia.
La mancha más grande de toda su historia. Hace exactamente una década, el 08 de julio de 2014, el local Brasil disputaba la semifinal de la Copa del Mundo frente a Alemania, que le dio un baile legendario al propinarle un escandaloso 7-1 en el Mineirao.
Las bajas de Neymar y Thiago Silva se sintieron fuerte en la Verdeamarela, que en media hora ya había encajado cinco goles germanos. Thomas Muller, Miroslav Klose, doblete de Toni Kroos, Sami Khedira y doblete de Andrea Schurrle le dieron una increíble victoria al futuro campeón de ese Mundial.
El llanto desconsolado de los jugadores del Scratch evidenciaban el papelón que habían realizado. Y bueno, desde ahí en adelante, solo conquistaron la Copa América 2019, pero han sido incapaces de meterse entre los cuatro mejores de una cita planetaria y su plantilla se ha devaluado de forma triste.
¿La maldición del gato persigue a Brasil?
Si bien antes había tenido presentaciones decepcionantes en Copa América 2015 y 2016, además de perder en casa la final de la edición 2021 frente a Argentina, un momento que terminó de enterrar a la Canarniha fue cuando en la previa de cuartos de final de Qatar 2022, un integrante del staff técnico lanzó a un gato que circulaba a su alrededor en sala de prensa.
Aquel repudiable y cuestionado actuar con el pequeño felino se acabó convirtiendo en una especie de maldición, que inició con la eliminación brasileña en esa misma fase de la Copa del Mundo ante Croacia en penales.
A partir del trato hacia el gato, Brasil quedó eliminado del Mundial 2022, fuera de los Juegos Olímpicos en fútbol, perdieron su invicto histórico en Maracaná jugando Eliminatorias Sudamericanas (vs. Argentina), ocupan sexto lugar en Clasificatorias y ahora eliminados en penales ante Uruguay en cuartos de Copa América 2024. Una crisis y maldición imparable.
