COLUMNA NO + ANFP | ¿La Roja de Todos o activo de las sociedades anónimas?
No + ANFP ese es el lema del movimiento que tiene a Raimundo Lira como uno de sus líderes. Por eso, acá te invitamos a debatir sobre cómo funcionan las convocatorias en las distintas categorías de la selección chilena.
Por Raimundo Lira, Vocero No + ANFP.
En Chile se ha normalizado una anomalía institucional que sería impensable en cualquier país con tradición futbolística: nuestra selección nacional, que porta los símbolos patrios y representa a todo el país, está controlada exclusivamente por 32 controladores de sociedades anónimas deportivas.
Este modelo, donde la Federación de Fútbol de Chile entrega por estatuto su presidencia y el control de la selección a la ANFP, no existe en ninguna otra federación del mundo y ha generado consecuencias devastadoras para nuestro desarrollo deportivo a largo plazo.
COLUMNA NO + ANFP | El fútbol femenino sufre con un consejo de presidentes entre gallos y medianoche
No + ANFP ese es el lema del movimiento que tiene a Raimundo Lira como uno de sus líderes. Por eso, acá te invitamos a debatir sobre el funcionamiento del consejo de presidentes de la Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP).
Los más de US$100 millones generados por la selección chilena entre 2014 y 2016, en lugar de fortalecer nuestro fútbol formativo, terminaron enredados en demandas, arbitrajes y situaciones financieras irregulares. Esta gestión deficiente se manifiesta en múltiples frentes: Chile no ha clasificado a un Mundial Sub 17 o Sub 20 desde Brasil 2019, fracasó en la clasificación al Mundial 2022, y la selección femenina se vio forzada a disputar la final de los Juegos Panamericanos 2023 sin arqueras disponibles por acuerdos mal gestionados con sus clubes europeos.
Estos casos revelan un patrón donde la ANFP y el Consejo de Presidentes priorizan sistemáticamente sus intereses de corto plazo por sobre un proyecto de selecciones nacionales integrales y planificado.
El contraste con las federaciones exitosas es revelador. La Federación Francesa de Fútbol (FFF) establece por estatuto que un porcentaje fijo de los ingresos de sus selecciones debe destinarse al desarrollo formativo y amateur. La DFB alemana incorpora en su consejo a ex-futbolistas y mantiene la autonomía de sus selecciones respecto a los intereses de la Bundesliga.
En Inglaterra, la FA opera con independencia de la Premier League y cuenta con un directorio que integra voces diversas del ecosistema futbolístico. Incluso Uruguay, con recursos más limitados, ha implementado un modelo donde la gestión de selecciones no está subordinada a los intereses de los clubes profesionales.
COLUMNA NO + ANFP | Separación de la Federación de la ANFP: una reforma necesaria
No + ANFP ese es el lema del movimiento que tiene a Raimundo Lira como uno de sus líderes. Por eso, conoce acá las razones de por qué la Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP) debe separarse de la Federación de Fútbol de Chile (Ffch).
Los defensores del modelo actual argumentarán que el fútbol profesional es una actividad privada. Sin embargo, esta justificación omite que en todos los países mencionados existe una federación autónoma que vela por el desarrollo integral del fútbol, con procesos democráticos y participación de múltiples actores.
La anomalía chilena, donde el presidente de la Federación es automáticamente quien dirige la asociación gremial de las Sociedades Anónimas, representa un diseño institucional obsoleto que no existe en ninguna otra federación moderna.
Las selecciones nacionales, que portan nuestros símbolos patrios y proyectan la imagen de Chile al mundo, no pueden seguir bajo el control exclusivo de 32 sociedades anónimas deportivas. La evidencia empírica es contundente: el desarrollo sostenible del fútbol requiere una federación independiente, con un gobierno corporativo moderno y mecanismos efectivos de rendición de cuentas.
Los países que han logrado éxitos sostenidos en sus selecciones mantienen una clara separación entre la gestión del fútbol profesional y el desarrollo deportivo nacional. Chile necesita urgentemente esta transformación institucional para recuperar su posición histórica en el concierto sudamericano y las selecciones nacionales vuelvan a ser “La Roja de todos”.
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